Si estás buscando un destino que combine maravillas naturales, hospitalidad y una historia que se pueda sentir en cada rincón, Jordania es el destino que estás buscando. Enclavado en el corazón de Oriente Medio, este pequeño país es una joya cultural que ofrece mucho más de lo que imaginas. Hoy te contamos por qué debes de viajar a Jordania y el origen de una de las maravillas más asombrosas del mundo: Petra.
¿Por qué viajar a Jordania?
1. Seguridad y hospitalidad: Jordania es uno de los países más seguros de Oriente Medio y su gente es conocida por su amabilidad, generosidad y calidez con los visitantes.
2. Paisajes únicos: desde el desierto de Wadi Rum, hasta el Mar Muerto (el punto más bajo de la Tierra), Jordania nos ofrece escenarios que parecen sacados de películas.
3. Riqueza cultural y religiosa: Jordania es parte de la Tierra Santa, pudiendo caminar por lugares mencionados en la Biblia, como el Monte Nebo o el río Jordán, donde según la tradición, fue bautizado Jesús.
4. Una rica gastronomía: si viajas a Jordania, no puedes irte sin probar un auténtico mansaf (el plato nacional), sus dulces de pistacho o degustar un auténtico café beduino en mitad del desierto.
Ahora hablemos de la ciudad rosa del desierto y una de las Siete Maravillas del Mundo: Petra. No solo es el mayor atractivo turístico de Jordania, sino que es una experiencia que te transporta a otro tiempo. Fue fundada en el s.VI a.C por los nabateos, un pueblo árabe nómada que supo asentarse y crear una civilización próspera en medio del desierto. Lo impresionante es que lograron establecer una ciudad en un terreno aparentemente inhóspito, rodeado de montañas y cañones, pero estratégicamente ubicado en las rutas comerciales que conectaban Arabia, Egipto, Siria y el Mediterráneo, posición que les permitió enriquecerse mediante el comercio de incienso, especias, oro y marfil. Su arquitectura está tallada directamente en la roca rosa del desierto, sobreviviendo al paso de los siglos, siendo además de una de las Siete Maravillas del Mundo, Patrimonio de la Humanidad.
¿Por qué Petra está tallada en roca?
Petra no fue construida con piedra, sino que fue esculpida directamente en roca; existen varias razones por las cuales, los nabateos eligieron esta técnica:
1. Disponibilidad del material: la región está compuesta por formaciones de arenisca, una roca relativamente blanda y fácil de tallar, y que puede resistir el paso del tiempo si se trabaja de forma adecuada.
2. Protección y camuflaje: esculpir directamente en la roca permitió aprovechar el entorno natural para proteger sus edificaciones de enemigos, tormentas de arena y terremotos; además, la ciudad se camuflaba bien en el paisaje desértico, lo cual dificultaba aún más que fuese detectada.
3. Símbolo de poder y habilidad: la grandiosidad de las fachadas, como la del Tesoro (Al-Khazneh) o el Monasterio (Ad-Deir) tenía un propósito tanto político como religioso, que era demostrar el poder, la riqueza y el conocimiento de los nabateos, y el tallar los templos, tumbas y teatros directamente en la roca de la montaña, era una forma de orar a sus dioses, líderes y ancestros.
4. Función práctica y espiritual: muchas de sus estructuras son tumbas reales o santuarios religiosos, y para los nabateos el hecho de tallar directamente en la roca, también tenía un significado espiritual, siendo una forma de unir la vida humana, con la eternidad de la piedra.
Aunque Petra fuese parcialmente abandonada tras la caída del Imperio Nabateo, su legado ha perdurado, estando "oculta" al mundo occidental durante siglos, hasta que fue redescubierta en el año 1812 por el explorador suizo Johann Ludwig Burckhardt, siendo hoy en día, uno de los sitios arqueológicos más impresionantes del planeta. Viajar a Jordania es conectar con una tierra que ha visto pasar imperios, profetas y comerciantes, es caminar entre ruinas milenarias y sentir cómo se detiene el tiempo. ¿Preparado para descubrir Jordania?